La domótica se ocupa de la automatización en edificios pequeños, como viviendas unifamiliares. En tanto, la inmótica se refiere a lo mismo, pero en grandes instalaciones industriales o sedes corporativas. Así, este término resulta de la unión de otros dos: inmo, que designa los grandes inmuebles, y el sufijo -tic en relación con sistemas automáticos, electrónicos o informáticos. Pero para saber exactamente qué es la inmótica y cómo funciona, conozcamos sus principios y diferentes tipos.
¿Qué es la inmótica?
Para entender en pocas palabras qué es la inmótica, digamos que es la automatización de edificios. Es decir, la instalación de sistemas de telecomunicaciones, informáticos y electrónicos que automatizan una serie de funciones.
Principalmente, estas funciones son las que hacen al confort, seguridad y ahorro energético del edificio. Así, la inmótica propone una sinergia entre todos estos sistemas, para hacerlos más eficientes y efectivos a lo largo del tiempo.
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La inmótica es una extensión de la domótica. En realidad, maneja sistemas mucho más complejos y con mayor número de dispositivos. La gestión óptima de estos dispositivos depende de una comunicación centralizada e inteligente.
Tipos de inmótica
Como ya lo dijimos, la automatización de edificios tiene como objetivo administrar una gran cantidad de dispositivos de forma más compleja.
En realidad, hay dos tipos de automatización que definen qué es la inmótica:
- Gestión técnica de edificios (GTB).
- Gestión técnica centralizada (CTM).
La Gestión Técnica de Edificios permite el control de todos los equipos presentes en un edificio para tener un seguimiento regular. El sistema informático recopila datos cuantitativos y cualitativos. Por ejemplo, controla equipos de suministro de energía, calefacción, ventilación, control de acceso y video vigilancia.
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La información recopilada se presenta en forma de tablas y gráficos para facilitar su lectura e interpretación. En tanto, permite detectar fallas del sistema e implementar las correcciones necesarias.
La Gestión Técnica Centralizada va un paso más adelante. Supone el establecimiento de una red de comunicación que permite gestionar los equipos de manera independiente. Así, se reducen las cargas o costos de mantenimiento y seguridad.
Sin embargo, este sistema permite por ejemplo el monitoreo de las instalaciones y controles de acceso de manera centralizada.
La inmótica se aplica a grandes edificios, por ejemplo:
- Sedes corporativas.
- Hoteles.
- Centros comerciales.
- Industrias.
- Almacenes.
¿Qué es la inmótica en relación con smart building?
La inmótica puede llegar a todas las áreas y automatizar las distintas funciones, convirtiendo la infraestructura en un smart building o edificio inteligente. Este conjunto de controles que es la inmótica permite simplificar la gestión del edificio creando espacios inteligentes donde los diferentes sistemas trabajan por sí mismos de manera automática.
Smart Building es un nuevo concepto en automatización de edificios que permite:
- Ofrecer a todos los usuarios servicios interesantes.
- Monitorear el consumo de electricidad, agua y gas para reducir costos y optimizar los servicios.
- Aumentar el confort gracias a un edificio que cumple con todos los estándares, facilitando el mantenimiento y la ventilación.
- Mayor seguridad, al monitorear accesos y movimientos dentro del edificio.
- Facilidad de control a partir de pantallas táctiles, controles remotos y dispositivos móviles.
Ejemplos de aplicación
Ahora que sabemos qué es la inmótica y cómo funciona, podemos comprender más fácilmente las ventajas de un edificio inteligente.
Muchas veces, la idea de smart building se asocia solamente a los sistemas HVAC, es decir, calefacción, ventilación y climatización. Sin embargo, va mucho más allá al incorporar otras funciones.
Por otra parte, si bien los edificios inteligentes más eficientes son los construidos desde cero, es posible incorporar los beneficios de la inmótica a edificios ya construidos.
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Por ejemplo, una de las aplicaciones más interesantes acerca de qué es la inmótica es la accesibilidad en hotelería. Implica un sistema de registro y control de entradas y salidas completamente informatizado, incluidas las llaves electrónicas.
Así, permite un importante ahorro en personal de recepción, funcionamiento las 24 horas y mayor seguridad para huéspedes y empleados.
En edificios públicos, permite el control de la iluminación y climatización, aportando mayor comodidad, seguridad y eficiencia energética.
Si hablamos de residencias sanitarias o de la tercera edad, la inmótica permite diseñar edificios que mejoran la calidad de vida e incrementan la seguridad. Por ejemplo, botones de emergencia en puntos clave o encendido automático de la iluminación por detección de movimiento. También, dispositivos de seguimiento de personas que sufren problemas de orientación.
¿Querés saber más acerca de qué es la inmótica? Los expertos de USS Argentina tienen más información.
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