El drone fumigador es una de las aplicaciones de drones en la agricultura. Según el INTA, Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, los drones tienen importantes aplicaciones en el sector agropecuario y agricultura de precisión. Así, el aumento del uso hace que la tecnología se abarate y esté disponible para más usuarios. Sin embargo, éstos deben estar capacitados, ya que el manejo de drones tiene varios requisitos. En tanto, los drones fumigadores ya tienen varios años de uso en la Argentina, por lo que la experiencia permite avizorar un futuro promisorio.
¿Qué es la fumigación en agricultura?
La fumigación es una técnica de aplicación de agroquímicos. Implica rociar los cultivos con pesticidas en forma aérea. Hay varias técnicas de fumigación.
Sin embargo, cualquiera de ellas está asociada a riesgos sanitarios, contaminación del aire, el suelo y el agua y perjuicios para las comunidades vecinas.
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Como su nombre lo indica, fumigar es aplicar algún producto por medio de humo, gas o vapores. Tradicionalmente la fumigación se realizó con aviones. Sin embargo, luego aparecieron otros métodos, como las máquinas fumigadoras y asperjadoras. Otra metodología es el trabajo “a muque”, con una mochila pulverizadora, como se hace en la provincia de Misiones.
Realmente, la aparición del drone fumigador marca un antes y un después, puesto que no solamente permite una aplicación más eficiente de agroquímicos, sino que evita el riesgo de exposición de trabajadores y productores rurales a este tipo de productos.
Desregulación del sector de drones en Argentina
El uso de drones en la agricultura, como el drone fumigador, está a punto de experimentar un cambio significativo gracias a la reciente aprobación del Decreto 663/2024. Esta normativa marca un paso hacia la desregulación aérea, especialmente en zonas rurales, lo que podría revolucionar la manera en que los productores agropecuarios utilizan esta tecnología.
El decreto sienta las bases para que la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) realice modificaciones en la normativa vigente, permitiendo un uso más flexible y adaptado a las necesidades del sector agrícola. En zonas rurales, donde las operaciones con drones suelen ser esenciales para tareas como fumigación, fertilización y control del suelo, la categoría “abierta” ahora exime de autorizaciones previas, simplificando los procesos para los operadores. Esto no solo facilita el acceso a la tecnología, sino que también permite ahorrar tiempo y costos.
La desregulación también fomenta la innovación, abriendo el camino para una mayor adopción de drones autónomos y el uso de inteligencia artificial en el agro. Sin embargo, es importante señalar que esta medida no representa un cambio inmediato en las normas operativas, sino que establece un marco para futuras modificaciones. Durante el período de transición, los productores y operadores deben seguir cumpliendo con la regulación actual y esperar a que ANAC detalle las nuevas reglas aplicables al sector.
En este contexto, el drone fumigador se perfila como una herramienta clave para la modernización del campo, alineándose con las políticas que buscan optimizar el uso de agroquímicos y reducir el impacto ambiental. Este avance normativo no solo potenciará su uso, sino que también permitirá a más productores adoptar esta tecnología, contribuyendo al desarrollo sostenible del sector agrícola en Argentina.
Principales características del drone fumigador
En pocos años la industria del drone fumigador ha evolucionado hasta presentar diferentes tipos de drones para fumigación o aplicación de otros productos químicos, como nutrientes, agua o fertilizantes.
Permite introducir los productos químicos correctos en las cantidades adecuadas, en el momento preciso. Exactamente éste es el desafío de los productores, ya que para aplicar agroquímicos por fumigación de manera efectiva, se depende de muchos factores como el viento, la temperatura o la humedad.
El drone fumigador está provisto de un sistema de boquillas pulverizadoras conectadas a una motobomba de alta presión. El sistema expulsa el producto por estas boquillas con mayor o menor fuerza, según las necesidades.
Además, está equipado con un GPS para programar la ruta o puede ser guiado por un piloto remoto en vuelo manual. Por otra parte, está conectado a un dispositivo que permite al operador monitorear el funcionamiento en tiempo real.
Casos de uso
Un relevamiento de los distintos usos del drone fumigador en agricultura revela que son más adecuados para extensiones medianas o pequeñas, cultivos de ciclo corto y áreas de difícil acceso.
Así, ya se están utilizando para tratar cultivos como:
- Tabaco
- Arroz
- Palta
- Banano
- Vid
- Olivos
- Frutales
- Hortalizas
- Semillas
- Yerba mate
- Algodón
Ventajas y desventajas del drone fumigador
Como toda tecnología novedosa, sus ventajas y desventajas todavía están en estudio. De hecho, la misma tecnología todavía se encuentra, al menos en Argentina, en etapa de pruebas.
Sin embargo, ya se pueden ir señalando algunas ventajas y desventajas.
Ventajas
- Acceso a áreas difíciles: Los drones fumigadores pueden llegar a lugares de difícil acceso, como terrenos irregulares, zonas con pendientes pronunciadas o áreas cercanas a obstáculos, donde los equipos tradicionales tienen limitaciones.
- Reducción de riesgos: Reemplazan a trabajadores en tareas peligrosas, minimizando la exposición directa a productos químicos nocivos.
- Eficiencia en el uso de recursos: Su precisión permite una aplicación optimizada de agroquímicos, reduciendo desperdicios, costos y el impacto ambiental en agua, suelo y aire.
- Velocidad y cobertura: Abarcan áreas más amplias en menor tiempo comparado con métodos manuales, agilizando procesos críticos como la fumigación en cultivos de ciclo corto.
- Impacto reducido en el suelo: Al operar desde el aire, evitan los daños físicos al suelo causados por maquinaria pesada, como compactación o erosión.
- Automatización avanzada: Su tecnología permite una programación precisa de rutas, cantidades de aplicación y monitoreo en tiempo real, facilitando la planificación y control de tareas agrícolas.
Desventajas
- Sensibilidad al viento y deriva: El producto pulverizado puede desviarse debido a corrientes de aire, lo que afecta la uniformidad de la aplicación y demanda el desarrollo de mejores boquillas antideriva.
- Cobertura limitada en profundidad: En ciertos cultivos, como viñedos o frutales, el producto aplicado con drones puede quedarse en las hojas superficiales, sin alcanzar las capas inferiores donde suelen concentrarse las plagas.
- Dependencia de algoritmos especializados: Las cargas líquidas dentro del tanque pueden desplazarse durante el vuelo, afectando la estabilidad y eficacia de la aplicación si los algoritmos no están bien calibrados.
- Precisión variable: Aunque cuentan con GPS, es posible que no sigan la línea del cultivo con exactitud, generando áreas de sobre o subaplicación.
- Limitaciones en terrenos inclinados: En cultivos con pendientes pronunciadas, como algunas viñas, los drones pueden ofrecer resultados inferiores en comparación con métodos terrestres tradicionales.
- Costo inicial elevado: La tecnología sigue siendo costosa, lo que dificulta su adopción entre pequeños y medianos productores, aunque programas gubernamentales y municipales están comenzando a aliviar esta barrera. Los drones fumigadores pequeños comienzan en USD 5,000, mientras que modelos avanzados como el DJI Agras superan los USD 20,000.
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Factores a tener en cuenta
Más allá de evaluar ventajas o desventajas, hay elementos a tener en cuenta que pueden condicionar el uso del drone fumigador.
- Costos. Al ser una tecnología todavía novedosa y no existir muchos dispositivos en el mercado, el costo puede ser alto para productores pequeños y medianos. En este sentido caben destacarse algunas iniciativas como en la provincia de San Juan, donde se utilizará el drone fumigador para el tratamiento de vides. El servicio será gratuito para los productores, ya que estará a cargo de un programa municipal. En tanto, solo deberán hacerse cargo de proporcionar el producto a aplicar.
- Legislación vigente. Por una parte, están las normas de la ANAC sobre vuelos no tripulados, que determinan la obligatoriedad de presencia de un operador certificado, distancias, alturas y otros requisitos. También se debe tener en cuenta las leyes de agroquímicos vigentes a nivel nacional y provincial.
- Edad de los usuarios. Si bien el campo no deja de modernizarse y las distintas generaciones de productores saben adaptarse a los cambios tecnológicos, el drone fumigador es realmente rupturista. Por ese motivo, la edad de la mayoría de los productores agropecuarios puede actuar como un factor condicionante para su uso.
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Hasta acá llegamos con la nota “Drone fumigador: usos, ventajas y desventajas”. Esperamos que te haya sido útil. Recordá que en USS Seguridad Integral somos especialistas en servicio de drones. Contactanos para más información.
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